Consiste en realizar una aproximación comercial a un banco de implantación nacional, como gestor de una entidad internacional dedicada a la gestión de activos.
La entidad gestora dispone de un catálogo de fondos de inversión temática, que tocan las tendencias más punteras y con mayor potencial y quiere vender sus productos. El banco al que cuenta su oferta de valor trata todo tipo de clientes retail (de menor a mayor sofisticación). Por el variado perfil de sus clientes dicho banco aborda diferentes estrategias de inversión, tanto paquetizadas como personalizadas, si el cliente lo requiere.
Además está intentando focalizar en inversiones sostenibles, para subirse a la ola de la sostenibilidad.